martes, 27 de abril de 2010

Malviaje.


Pocas veces he estado tan encabronada con la vida, me duele la cabeza sólo de pensar, me siento fastidiada de todo, ya me canse de arreglar las cosas, quisiera mandar todo a la chingada en este mismo momento, ya me canse de esos momentos de "felicidad" que no son sino una espera para el siguiente problema, estoy herida y encabronada, por que me agarraron de sorpresa justo cuando creí que todo iba perfecto, de eso ya tiene unos meses, de ahora en adelante ya no tendré paz, esa inocencia de creer que las cosas pueden salir bien, la creencia de que me puedo quejar sin que pase algo malo, la creencia de que estoy haciendo bien las cosas. a la chingada!!!!!!!!!!!!! no puedo decir que algo me disgusta porque en seguida todo se voltea en mi contra, ¡quiero poder explotar! ¡quiero poder exigir! ¿por qué tengo que contener mi enojo?

Estoy triste y desconsolada, quisiera hundirme y quedarme en el fondo, lo mas patético de la situación es que yo sola tendré que controlar mi ira y olvidar todo aquello que me esta haciendo enojar ahora para poder seguir, pero y si ya no quiero seguir? estoy convencida que la verdadera cara de las cosas es la que puedo ver ahora, la otra cara sólo las ve uno para poder seguir con la vida cotidiana, seria genial que sucediera con el enojo como una especie de iluminación, en la que si eres capaz de alcanzar el máximo punto de enojo contra la vida te pudieras elevar y dejar de existir, así nada mas... sin dolor, PERO NO! si yo me clavara con este pensamiento lo mas seguro es que me volvería un gusano miserable y tarde o temprano me tendría que levantar, lo cual implicaría un esfuerzo el cual no estoy dispuesta a hacer.

Espero que esto les malviaje tanto como a mi.